En el ala oeste del tercer piso se encuentra un amplio espacio de corredores, recubiertos con terciopelo rojo, y paredes de piedra empapeladas de un suave tono beige. Son las habitaciones de los invitados, compuestas por camas adoseladas, mesitas de noche, armarios y un servicio de lujo las veinticuatro horas del día.
Sólo los caballeros de la Orden y los miembros de la Nobleza pueden traer invitados a Palacio.